l gótico representa la culminación de un proceso cultural en Occidente. Comienza en la segunda mitad del siglo XII con el florecimiento de aquellas ciudades que serían el motor del desarrollo de este estilo.

El artista adquiere la plena independencia. La iglesia empieza a ejercer un cierto dominio sobre el arte, utilizándolo como medio para mantener sus creencias. Se ensalza a la mujer a través del culto a la Virgen. Por otro lado encontramos una gran diferencia social, por lo que el arte se divide, se extiende y logra profundizar más en la sociedad.

Las universidades son las encargadas de difundir los conocimientos científicos, literarios y filosóficos, que durante esta época sufren un gran desarrollo. Esta etapa termina con tres hechos determinantes, la invención de la imprenta, los ideales de la cultura italiana renacentista y los grandes descubrimientos geográficos.

Durante los siglos XIII, XIV y XV Cantabria sufre una evolución del señorío laico en detrimento del señorío monástico. Dominan las grandes casas nobiliarias, los Velasco, Vega Mendoza, y otros muchos pequeños linajes. El arte producido por esta nobleza es muy escaso, se centra principalmente en la construcción de torres defensivas como las de Santillana o Argüeso.

El Arte se centra sobre todo en las villas costeras, que empiezan a tener importancia por el auge de la actividad marinera. Cada una de las villas marineras, San Vicente de la Barquera, Santander, Santoña, Laredo y Castro Urdiales, tiene un estilo propio que se aprecia en la producción artística de esta época. Castro Urdiales fue la villa más burguesa de todas, su iglesia parroquial es la única construcción de Cantabria que recoge el estilo de las grandes ciudades, inspirándose directamente en la catedral de Burgos. El alzado de esta iglesia data de la segunda mitad del siglo XIII.

En Santander, hasta el siglo XIV, durante toda la Baja Edad Media hay un dominio de la Colegiata sobre la Villa debido al apoyo real, que otorga al Abad el título de primera autoridad. Por este motivo la colegiata adopta un estilo monástico, como el Gótico Borgoñón, cerrándose sobre sí mismo, sin torres, vidrieras, sin altura

En Santoña, el monasterio de Santa María del Puerto adopta en el siglo XIV el estilo Borgoñón tomándolo de la parroquia burgalesa de San Gil.

En 1271 el conjunto Monástico de Santo Toribio de Liébana recibe el apoyo real, por lo que adopta desde ese momento un estilo áulico que se conoce con el nombre de "Arquitectura Alfonsí". Lo mismo sucede en Laredo, que tras el apoyo recibido por la corona de su flota marinera para la conquista de Sevilla en 1248, el rey concede una ayuda para la construcción de la iglesia.

En San Vicente de la Barquera la ayuda real llegó en 1210, el estamento eclesiástico de esta villa tenía una alta cualificación social. El templo construido ha sido muy transformado, por lo que es difícil realizar un estudio estilístico de la obra del siglo XIII, pero se intuye un parecido con la iglesia de Laredo.

Este estilo áulico puede verse también en los ábsides de la cripta de la Catedral de Santander.

El gótico en Cantabria no tiene el mismo sentido que tiene en otros lugares, donde se alza como una respuesta de la sociedad laica al mundo monástico rural; los monasterios en nuestra región siguen teniendo su importancia, sobre todos aquellos que están ligados a las villas.

Para comprender el desarrollo arquitectónico es importante conocer los acontecimientos históricos que se desarrollan. La Colegiata de Santander fue campo de batalla en la resistencia de la villa al intento del marqués de Santillana de anexionarla en 1466.

La iglesia de Latas fue destruida por un incendio tras unos acontecimientos violentos en el año 1558 entre los Velasco y el Monasterio de Monte Corbán por su posesión.

La pintura y la escultura no tuvieron un gran desarrollo, la falta de una burguesía comercial fue determinante para su estancamiento. Las pocas obras conservadas fueron importadas desde Castilla o desde el extranjero como el retablo de Belén de Laredo.



BIBLIOGRAFÍA: (autores varios) " Guía del Arte en Cantabria ". Diputación Regional de Cantabria, 1988. Santander

GARCÍA GUINEA Miguel Angel "Cantabria Guía Artística". Ediciones Estudio, 1988. Santander