Es Salces - nacido en Suano, Campoo de Suso- otro de los paisajistas cántabros que sintiera la sugestión de los valles campurrianos.
Pintor autodidacta, tuvo que desempeñar labores de labrador y cantero antes de dedicarse al arte; sin duda vocación tardía, ya que tiene cuarenta años cuando sus cuadros reflejan una cierta madurez creativa.
En 1912 se trasladó a Madrid donde recibiera el influjo de Beruete; alcanza cierto éxito en1919 con una exposición en el Ateneo de Santander y su participación en el certámen de Artistas Montañeses del círculo de Bellas Artes de Madrid.
Entre 1920 y 1932 - año en que fallece- pinta Manuel Salces su mejor obra, en la que se pueden rastrear influjos neoimpresionistas e incluso divisionistas en la factura de sus bellos paisajes neblinosos, fieles imágenes de la naturaleza de Cantabria.

VISTA DE NESTARES (cuadro)
Señala D. Santiago Corral - especialista en la obra de Salces- como, dentro de los paisajistas montañeses, cada uno pareció especializarse temáticamente. Si, en consecuencia, Riancho es llamado "el pintor del árbol" y Cassimiro Sainz "el pintor de los prados", Salces diversificó sus motivos, aunque eligiese con frecuencia paisajes amplios, vistos desde la lejanía. Ello le dió ocasión a desmaterializar los objetos, intuidos entre los característicos celajes de Manuel Salces, quizás "el pintor de las nubes" o, como en esta "Vista de Nestares" a un tratamiento minucioso y descriptivo, propio de su primera época.

 


BIBLIOGRAFÍA: "Cien Años de Pintura en Cantabria (1815 - 1915)". Diputación Regional de Cantabria. Instituto del Patrimonio Histórico y Monumental de Cantabria. 1988. Santander.